sábado, 9 de abril de 2022

LA TRAICIÓN


 

          Los hermanos se mataron como enemigos. Sí, como si se hubieran odiado desde el momento de nacer. Pero no, nunca se habían odiado. Siempre se quisieron mucho y fueron los mejores amigos por más de veinte años. Si uno sufría, el otro también sufría. Si uno era feliz, el otro lo era más por la felicidad de su hermano. Pero como bien dicen por ahí, no todo es eterno.

Un día apareció una joven y guapa mujer en las vidas de estos buenos muchachos. Uno de ellos, el mayor, se enamoró perdidamente de ella y después de un corto noviazgo llegaron al altar para bendecir su amor, mientras el diablo sonreía maléficamente desde un rincón.

Luego de un par de años, hastiado de la paz que reinaba en la familia de los hermanos en cuestión, el ángel malvado envenenó las almas del hermano soltero y la cuñada, llevándolos a traicionar al esposo enamorado. Amantes se volvieron hasta el día que fueron sorprendidos en el pecado. Cual si fueran animales rabiosos, se trenzaron en cruenta batalla hasta que ambos sacaron sus pistolas y se dispararon cayendo muertos al instante.

Hoy, después de varios años, una madre sigue llorando por tal tragedia, mientras una viuda está felizmente casada, formando una familia.